miércoles, 9 de abril de 2014

Miradas

El tercer sexo




Norrie, pues utilizará este único nombre,
en un parque de Sidney. Foto El País
Wladimir Sepúlveda.
Foto elmostrador.pais












Norrie acaba de adquirir el "género neutro", por ahora, el "tercer sexo". 
   En las antípodas de nuestro mundo, en Australia, la Justicia acaba de dar respuesta a una persona que, por indefinición, no siente la sexualidad con la que nació. No muy lejos, en Chile, y a todos nos consta que aún en nuestras calles, unos "Inquisidores del sexo" apalean hace unos meses a Wladimir Sepúlveda y muere estos días en un hospital debido a las gravísimas heridas que le produjeron; no respetaron su derecho a liberarse de unos pliegues, unas curvas en su piel, o unos músculos, que le suponían una prisión. Son la antítesis del comportamiento ante el derecho a decidir del otro; el primero en un avance hacia la Libertad, a pesar que algunos no vean más que la feria mediática, mientras el otro es la vuelta a las cavernas del miedo o los calabozos de los fascismos (no dejen de buscar los registros sonoros e imágenes de nuestra historia más reciente durante el franquismo, ahí mismo en el tiempo, sobre la persecución a los "maricas/ones", como los llamaban degradantemente; quedan algunos intransigentes vestidos de marca y libertinajes, bendecidos por algunos "sotarrancios", que intentan anular la legislación reciente que ampara los matrimonios entre personas del mismo sexo y sus derechos civiles (ni qué decir tiene la suprema opción de formar familia y criar y educar hijos como cualquiera; y que tengamos que todavía decirlo a estas alturas; por eso, el colectivo gay, que está al loro, premia al anterior presidente del gobierno, el socialista José Luis Rodríguez Zapatero, Pluma 2014, reconociéndole las cotas legislativas en ese sentido, junto a otros muchos, en la lucha contra la discriminación por orientación sexual e identidad de género).
  Pero en el carro de las coincidencias en el tiempo he aquí que en un lapsus se sube al carro de la noticia el presidente de Extremadura, el popular José Antonio Monago, que, ojo avizor, "vende" su tierra: "el turismo gay es más relevante hoy que el de todos los turistas chinos juntos, tal y como asegura la Organización Mundial del Turismo". Pero lo gracioso, por no rozar lo tragicómico, es que tales afirmaciones las realiza en la presentación de la fiesta de "Los Palomos", qué jerga, un encuentro anual en Badajoz donde se espera que se congreguen este año más de veinte mil personas (el poder tratando de atraer divisas como sea: regalando nacionalidades por rublos, antepasados judíos en la península...).
  Me pregunto si ante tal baño de multitudes no se colarán de rondón el actual presidente Mariano Rajoy y coadláteres. Total, que vayan temprano a esta edición pues, como se liberalice pronto el país asiático, en las próximas convocatorias no va a caber un clavo entre tanto "Palomo" chino.
  
¡Qué fiesta se puede montar con estos "Palomos"!
blogdelosliberales.blogspot.com
   Lo que hay que ver, y oír todavía, a la hora de tratar ciertos temas primordiales sobre las personas en este país, nuestro y diverso.

1 comentario:

  1. Me ha gustado que recordases la muerte de Wladimir. Sentí vergüenza. Gracias. Y muy graciosa la foto.

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